INTERÉS GENERAL
¿De qué se trata el síndrome del ternero “fantasma” y cómo se puede prevenir?
Los productores ganaderos constantemente evalúan todas las herramientas a su alcance y se capacitan con el fin de mejorar sus índices y lograr obtener la mayor producción de carne por hectárea.
Una de las alternativas propuestas por reconocidos médicos veterinarios e ingenieros agrónomos, es incorporar al rodeo de bovinos a servir, las vaquillonas de 15 a 18 meses (siempre y cuando su condición corporal y sanidad lo permita).
Esto puede venir de la mano del el uso de inseminación artificial a tiempo fijo, una técnica que trae grandes beneficios ya que:
• Permite cumplir el objetivo de un ternero por vaca por año
• Los terneros destetados de las vacas inseminadas pesan más
• Permite concentrar las pariciones
• Facilitar el manejo
Sin embargo, todavía esta practica no es común en la mayoría de los establecimientos ganaderos. Requiere una inversión pero, al final de la historia, se gana mucho más.
De aquí, surge el denominado “síndrome de ternero fantasma”, y a través de Sergio A. Marcantonio, especialista en este tema, Infocampo cuenta de que se trata.
La utilización de la pintura en la base de la cola en las vaquillonas de 15 meses incorporadas a programas de IA puede, considera que puede ser una herramienta que aporte racionalidad a los tratamientos inductores y/o sincronizadores de celo u ovulación.
“Recuerdo la expresión tan descriptiva utilizada por el doctor Jock Macmillan de ‘Síndrome de la vaca fantasma’ para referirse a aquella situación en la que una hembra vacía no retorna al celo luego de un programa de resincronización”, recordó el especialista.
Básicamente, este comportamiento surge a partir de que, frente a los tratamientos de sincronización de celos, la vaquillona actúa como si fuera una vaca con cría al pie, aún sin tenerlo.
“En muchas ocasiones estas vaquillonas son incorporadas a programas de inseminación en un estado de anestro o en una etapa peripuberal por lo que los resultados obtenidos en esquemas de sincronización con agentes luteolíticos son pobres. Muy similares a los conseguidos al utilizar prostaglandinas en vacas con cría al pie” indicó.
Por lo tanto, esto se suele dar en categorías en las que un importante porcentaje de los vientres no está cíclico, “por lo que podríamos decir que las vaquillonas de 15 meses, en muchas oportunidades tienen un ternero fantasma” sostuvo.
¿CÓMO SÉ QUE LA VAQUILLONA ESTÁ PASANDO POR ESTA SITUACIÓN?
Marcantonio asegura que la condición corporal o el estatus ovárico-uterino definido al tacto (con sus grandes limitaciones) son los parámetros habitualmente utilizados para ensayar una respuesta, “pero lo cierto es que muchas veces uno u otro no resultan un fiel reflejo de primera realidad endocrina de los vientres”.
Otra posibilidad, puede ser realizar la detección de celo una semana antes para estimar el grado de ciclicidad de las vaquillonas. Pero esta opción brinda una información global de la funcionalidad del rodeo, que no permite tomar una decisión animal por animal.
Frente a este escenario, al especialista se le ocurrió ya hace unos años, plantear una nueva alternativa metodológica: utilizar un indicador objetivo de ciclicidad individual como es la pintura en la base de la cola que posibilite un tratamiento de sincronización más racional.
UNA NUEVA METODOLOGÍA
Consiste en pintar a las vaquillonas 50 días antes del servicio, evaluar el grado de despintado a los 25 días y repintar con un nuevo color a las despintadas. De esta manera, antes de iniciar el tratamiento, se obtendrán las siguientes categorías de vaquillonas en función de la pintura:
1. Vaquillonas que no están despintadas y tienen el color de la primera pintura
2. Vaquillonas que no están despintadas y tienen el color de la segunda pintura
3. Vaquillonas que están despintadas y tienen el color de la primera pintura
4. Vaquillonas que están despintadas y tienen el color de la segunda pintura.
La interpretación en función de la pintura es la siguiente:
1. Son aquellas vaquillonas que estuvieron y están en anestro.
2. Son aquellas vaquillonas que estaban ciclando pero ahora están en anestro.
3. Son aquellas vaquillonas que están ciclando en su primer ciclo.4. Son aquellas que están ciclando con más de un ciclo.
Los resultados y las futuras decisiones:
1. No incluirlas en el programa.
2. Utilizar un programa en base a progestágenos.
3. Utilizar un programa en base a progestágenos y prostaglandina.
4. Utilizar un programa en base a prostaglandinas.
CONCLUSIONES
Por más que a primera impresión resulte dificultoso o engorroso de manejar, el especialista y aquellos productores que ya lo han probado aseguran que los resultados son muy buenos. Basta conocer esta “tecnología” y tener personal capacitado. “Descubrimos que la utilización de la pintura es una buena forma de evidenciar al ternero fantasma” concluyó Marcantonio.