INTERÉS GENERAL
LAS CINCO MEJORES TECNOLOGÍAS QUE PUEDEN AYUDAR A LOS AGRICULTORES A ENFRENTAR AL CAMBIO CLIMÁTICO.
En todos los lugares, los agricultores están enfrentando a un desafío mayor. Deben adaptarse a las condiciones climáticas cambiantes –tales como una mayor frecuencia de sequías, temperaturas extremas e inundaciones- a la vez que deben también reducir su huella ecológica. Échale un ojo a estas cinco tecnologías que están ayudando a los agricultores a mantener e incrementar la productividad a pesar de los cambios climáticos.
Agricultura sin labranza
Evitar la labranza ayuda a mantener la humedad, la materia orgánica y los nutrientes del suelo, haciendo más fértiles los campos de cultivo. La agricultura sin labranza modera los efectos del cambio climático al evitar la erosión del suelo durante inundaciones, y hace más lenta la evaporación de agua durante los años de sequía. Al reducir la labranza, los agricultores reducen también el uso de combustibles fósiles al realizar menos pasadas sobre el campo con el equipamiento de cultivo. El Programa Ambiental de las Naciones Unidas estima que la agricultura sin labranza en los EE.UU. ha ayudado a evitar emisiones de 241 millones de toneladas de dióxido de carbono desde los años 70 -equivalentes a las emisiones anuales de 50 millones de autos-.
Características tolerantes al calor
Con las temperaturas en aumento debido al calentamiento global, las olas de calor están poniendo la seguridad de nuestros cultivos y comida en riesgo. Los científicos están evaluando nuevas características genéticas que pueden mejorar la tolerancia al calor de los cultivos. Por ejemplo, la Universidad de Florida ha desarrollado características estables al calor que mostraron un incremento del rendimiento en condiciones cálidas. En sus pruebas, la producción de trigo tuvo un incremento de un 38 por ciento, el arroz de un 23 por ciento y el maíz de un 68 por ciento.
Maíz tolerante a la sequía
La sequía es la mayor amenaza para los cultivos en el mundo, ya que la agricultura requiere más agua que cualquier otra actividad industrial en la tierra. La Organización para la Alimentación y la Agricultura de las Naciones Unidas (FAO) estima que para el 2050 aproximadamente 480 millones de personas en África podrían estar viviendo en áreas de escasez hídrica. Para prepararnos para este desafío, los científicos están investigando sobre características de tolerancia a la sequía en plantas. Por ejemplo, el proyecto Maíz Hidro-eficiente para África (WEMA por sus siglas en inglés), que reúne a investigadores de los sectores público y privado, está desarrollando vías para duplicar los rendimientos de maíz por medio de fitomejoramiento convencional y fitomejoramiento asistido por marcadores, así como mediante biotecnología vegetal.
Protección de cultivos
El cambio climático está llevando a plagas y enfermedades hacia nuevas áreas geográficas donde están atacando cultivos y amenazando el suministro global de alimentos. Hasta el 40 por ciento de los cultivos del mundo ya se han perdido debido a plagas de insectos, enfermedades, y malezas, pero sin la protección de estos cultivos, las pérdidas podrían duplicarse. Gracias a productos para la protección de cultivos, los agricultores han continuado incrementando sus rendimientos a pesar de las amenazas cada vez mayores de plagas y enfermedades.
Eficiencia en el uso de Nitrógeno
Los fertilizantes de nitrógeno contribuyen a aumentar los rendimientos de producción, y es una manera de que los agricultores puedan cultivar más comida en las áreas de cultivo ya existentes. Sin embargo, si se aplica mucho fertilizante a un campo, los excesos se pierden y pueden hacerse camino hacia la tierra circundante y fuentes de agua. Para proteger al ambiente y a los habitantes locales, los científicos han desarrollado características en plantas de eficiencia en el uso de nitrógeno (NUE, por sus siglas en inglés). Esta tecnología permitirá a los agricultores aplicar menos fertilizante de nitrógeno sin sacrificar los rendimientos. En un experimento en EE.UU., plantas de canola NUE (eficientes en el uso de nitrógeno) cultivadas con tan sólo la mitad de la aplicación típica de nitrógeno, rindieron tanto como las variedades convencionales.
FUENTE AGROTENDENCIATV