AGRICULTURA
HERBICIDAS, CLASIFICACIÓN Y USO
Un herbicida es un producto químico o no que se utiliza para inhibir o interrumpir el desarrollo de plantas indeseadas, también conocidas como malas hierbas, en terrenos que han sido o van a ser cultivados.
Etimología: procede del latín herba (hierba) y cida (matador, exterminador, “que mata”)
Como malas hierbas entendemos aquellas que crecen y se desarrollan en un lugar o momento no deseado por el hombre. La mayor parte de malas hierbas poseen las mismas características: son de fácil dispersión, ya que suelen hacerlo gracias al viento o arrastradas por el agua y poseen una gran resistencia, debido a su elevada producción de semillas. Entre los problemas que éstas generan encontramos, entre otros, la reducción de la cosecha, provocada por la utilización de recursos, tales como espacio, luz, agua,… dedicados a la misma, y que por su presencia deben compartir. También afectan a la recolección, dificultando o ralentizando la recogida de la cosecha además de un incremento de costes, ya que si no se tratan a tiempo es necesario combatirlas.
Para elegir un herbicida, tendremos en cuenta el estado del cultivo, el estado y tipo de la maleza que queramos controlar, así como las características físicas del suelo.
Los herbicidas los podemos encontrar en el mercado en formulaciones sólidas o formulaciones líquidas. Depende de los ingredientes activos y de su forma de aplicación.
El número de ingredientes activos, o moléculas de herbicidas registrados sobrepasa los 130 y el de herbicidas comercializados, compuestos de diferentes combinaciones o formulaciones de ingredientes activos, sobrepasa en España los 600.
Nomenclatura de los herbicidas
La etiqueta de un herbicida contiene tres nombres:
- Nombre químico, que describe la composición química del compuesto herbicida.
- Nombre común, que es el nombre genérico dado al ingrediente activo y está aprobado por autoridades apropiadas.
- Nombre comercial.
Por ejemplo, el herbicida vendido con el nombre comercial de Glifos Titan tiene el nombre común de Glifosato, que es su ingrediente activo, y el nombre químico N-(fosfonometil) glycina.
La formulación del herbicida se indica en la etiqueta del producto y se designa por una o varias letras después del nombre comercial. En la etiqueta del herbicida también se indica la cantidad de ingrediente activo en porcentaje y en gramos de ingrediente activo por litro o kilogramo del producto comercial.
Tipos de herbicida
Existen varias formas de clasificar los herbicidas, incluyendo cómo se usan, sus propiedades químicas y su modo de acción.
Herbicida total vs Herbicida selectivo
Como se puede observar en el esquema, podemos separar los herbicidas en función de la cantidad y tipología de la mala hierba a la que combaten, entre herbicida total y herbicida selectivo.
Un HERBICIDA TOTAL es aquel producto fitosanitario que se aplica con la finalidad de controlar la totalidad de las malas hierbas existentes, sin discriminación. Los herbicidas totales, son generalmente utilizados para limpieza de terrenos. Con ellos se consigue el control total de especies de malezas anuales y perennes.
Se suelen comercializar en formato líquido y su dosis variará por el tipo de mala hierba y la dimensión de la misma. La materia activa presente en la mayoría de estos herbicidas es el glifosato. Normalmente son utilizados para terrenos sin cultivos, zonas industriales, carreteras etc. Si se aplican en terrenos con cultivos deben aplicarse de modo que no afecten al mismo. La selectividad del cultivo y el espectro de control de malezas se usan a menudo en la clasificación de herbicidas, por ejemplo, herbicidas para cereales y herbicidas para malezas de hoja ancha.
Un HERBICIDA SELECTIVO es aquel que se utiliza para eliminar un tipo concreto de mala hierba, preservando el resto de cultivo sobre el que se aplica.
Por ejemplo para la maleza de hoja ancha (dicotiledóneas) o la de hoja estrecha (Cynodon, Cyperus, etc.). Los herbicidas selectivos de hoja ancha se aplican principalmente en los meses de primavera y otoño. Los herbicidas selectivos de hoja estrecha debe repetir su aplicación entre 2 y 3 veces.
Esta distinción, selectivo o total, depende de la concentración o dosis de uso, ya que un herbicida total puede convertirse en selectivo a bajas concentraciones y uno selectivo a dosis elevadas puede eliminar cualquier tipo de planta.
Herbicida residual vs Herbicida foliar
Los herbicidas pueden ser residuales o de suelo y foliares o de hojas.
Los HERBICIDAS RESIDUALES son aquellos que se emplean para eliminar las malas hierbas del pie de los árboles.
No son muy utilizados en jardinería, centrándose principalmente en la fruticultura. Destaca su aplicación en el olivar. El herbicida residual o de suelo, como su nombre indica, se aplica directamente sobre el suelo, creando una película que al ser traspasada por las malas hierbas, les provoca la muerte. En principio no afecta a aquellas malas hierbas que ya existen, sino a las que vayan a germinar.
Su efecto en el suelo suele durar semanas o meses, así que aproximadamente al mes y medio se puede repetir la aplicación. Normalmente no son activos sobre especies perennes y si sobre aquellas que nacen de semillas.
El HERBICIDA FOLIAR, de hoja o follaje se clasifica en herbicida foliar de contacto y herbicida foliar sistémico.
El herbicida foliar de contacto, se centra en la destrucción de hojas y tallos donde se aplica el mismo, no afectando en ningún momento a la raíz.
Ejemplo: Paracquat (para Gramíneas) o Diquat (para hoja ancha).
El herbicida foliar sistémico, se aplican, al igual que los foliares de contacto, sobre las hojas y tallos, pero con la diferencia que estos son absorbidos y la savia traslada hasta la raíz de la misma para que la totalidad de la planta muera.
Ejemplo: Glifosato o Sulfosato. Son los que pueden con las malas hierbas perennes.
Cuando hablamos de sistémicos y foliares, se utiliza el término traslocación, para definir que el herbicida se trasloca a otras zonas a través de la planta en el caso de los sistémicos o no lo hace, en el caso de los foliares. Esta traslocación se realiza a través del floema, que es el tejido conductor encargado del transporte de nutrientes orgánicos e inorgánicos -especialmente azúcares- producidos por la parte aérea fotosintética y autótrofa, hacia las partes basales subterráneas, no fotosintéticas, heterótrofas de las plantas vasculares. También se pueden denominar tubos o vasos liberianos.
Herbicida de presiembra, preemergencia y postemergencia
Se llama HERBICIDA DE PRESIEMBRA a aquel aplicado sobre el terreno desnudo.
Se recomiendan cuando se practica siembra directa sobre rastrojo y es necesario destruir la maleza antes de la siembra del cereal (por término medio un mes antes de comenzar la siembra, dependerá siempre del producto utilizado, tipo de suelo,…).
El HERBICIDA DE PREEMERGENCIA es aquel que se aplica antes de la emergencia de las malas hierbas, no siempre coincide con la emergencia del cultivo, aunque éste ya esté sembrado.
Normalmente se recomiendan cuando en la parcela haya habido anteriores casos de malas hierbas.
Hay que poner especial atención al estado del terreno, ya que si tras la aplicación del producto se produce una sequía prolongada, puede verse reducida su eficacia. Donde mejores resultados muestran son en regadío o en secano de carácter húmedo.
El HERBICIDA DE POSTEMERGENCIA es aquel que se aplica después de la emergencia de la mala hierba. La postemergencia propiamente dicha es una práctica dirigida al control de las malas hierbas en estado de plántula más o menos desarrollada que han escapado a una aplicación de presiembra o preemergencia. Estos herbicidas suelen ser de acción foliar, bien por contacto o sistémicos y algunos también con acción residual.
Herbicidas de postemergencia precoz. Estos son los herbicidas de preemergencia que se aplican sobre las malas hierbas recién emergida.
Existen herbicidas que pueden ser aplicados en preemergencia o postemergencia según sea el cultivo, el terreno, la climatología y otros factores.