En las afueras de la ciudad de Sao Paulo, una gran cantidad de soja, caña de azúcar y el café se cultiva. Los agricultores de esta zona son en su mayoría japoneses de segunda generación. Sus padres se mudaron a Brasil en 1950 e hicieron una marcha de la horticultura. La generación actual es uno de los empresarios impulsados.

En los invernaderos de túnel modernos, los cultivos de hoja se cultivan en agua. Durante la visita, Horti-Consult visitó la empresa de productores japoneses Jorge Morikawa y Eduardo Miyayacixi. La empresa está ubicada en Hollando.

Fue lanzado en 2002 con el cultivo de lechuga hidropónica. La empresa es ahora 2,5 hectáreas. La compañía se distingue por la comercialización de sus productos bajo la marca de distribuidor Saladas Finas. Esto es sinónimo de calidad y continuidad. 

Todo lo que se siembra en bandejas que se llenan con una mezcla de coco y perlita. Las bandejas se hacen mojado por 1.2 CE. Después de la germinación de la bandeja se mantiene húmedo por 1.0 CE. Si hay enraizamiento suficiente de la bandeja de enchufe, las plantas se trazan usando tubos de PVC provista de orificios, cada uno con una distancia de 15-20 cm, por lo que es posible establecer 64 plantas / m2.

El cultivo requiere mucha disciplina y control. Para un buen flujo, los drenajes se encuentran en una pendiente de 15%. La cantidad de riego depende del tamaño de la planta y la humedad de la clavija. Muy importante es la calidad del agua de riego, la temperatura y el contenido de oxígeno. 

Una nutrición básica es proporcionada de nitrato de calcio, nitrato de potasio, fosfato de potasio mono y oligoelementos. Las cabezas maduras tienen un peso de 350 gramos. El costo de la planta son 40 reales (moneda en Brasil, lo que corresponde a 12 céntimos de euro). Los cultivos se venden por 80 reales, el equivalente a 24 centavos de dólar.

FUENTE Traducción y edición por Luciano Mansilla para Foods NewsLatam.com